La conversión de deuda por naturaleza de Ecuador recibe reconocimientos internacionales por su innovación financiera

Una vez más, el Ecuador ha sido reconocido a escala internacional con tres  premios de alto prestigio por sus operaciones de conversión de deuda por naturaleza. Esta vez, el reconocimiento estuvo vinculado al Programa Biocorredor Amazónico, transacción que es considerada entre las más innovadoras y con mayor impacto ambiental de la historia reciente.

Estructurada por un equipo multidisciplinario que incluyó al Gobierno de la República del Ecuador, con la asistencia técnica de The Nature Conservacy (TNC), la participación de US Development Finance Corporation (DFC) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la operación permitió la recompra de más de USD 1.500 millones de bonos soberanos, mediante una emisión de bonos por USD 1.000 millones, que permitenel financiamiento del Fondo Biocorredor Amazónico por USD 460 millones destinados a  fortalecer la gestión de 4,6 millones de hectáreas de áreas protegidas existentes y asegurar la conservación de 1,8 millones de hectáreas adicionales de bosques y humedales en el corazón de la Amazonía ecuatoriana hasta el 2035.. Entre los aspectos más destacados del acuerdo está el hecho de que se trata del primero en su tipo en incorporar objetivos de conservación tanto terrestre como de agua dulce.

Cada año, los  GlobalCapital Latin American Bond Awards 2025, reconocen la innovación financiera en los mercados de capital de deuda de toda América Latina. Este año, la transacción del Biocorredor ha sido galardonada en abril del 2025 en Nueva York con dos premios: 1) Operación de manejo de pasivos más impresionantes del año; y 2) Mejor operación financiera con respaldo de organismos multilaterales del año.  Según comentarios de GlobalCapital, se destacó que a pesar de las condiciones relativamente estables de los mercados de bonos en América Latina en 2024, las entidades participantes aprovecharon la coyuntura para demostrar una creatividad financiera sobresaliente.

Por otra parte, la transacción también ha sido reconocida dentro de los “Environmental Finance´s Sustainable Debt Awards del 2025. Los premios anuales reconocen a los participantes el papel que juegan en fomentar el desarrollo de instrumentos financieros sostenibles en el mercado de bonos como de deuda. Es así que, Ecuador ha sido reconocido con el premio a la Innovación en la Estructuración de Bonos (verdes).  

Uno de los jueces de esta entidad* calificó la transacción como “una estructura muy innovadora que reduce el endeudamiento de un país emergente y, al mismo tiempo, logra objetivos basados en la naturaleza”. 

Así, el Programa Biocorredor Amazónico se consolida como una plataforma estratégica que promueve una visión de desarrollo para la región, integrando conservación, saberes locales, ciencia, políticas públicas y mecanismos innovadores financieros internacionales. Esta iniciativa presenta a la Amazonía ecuatoriana como un territorio para la sostenibilidad global, que conecta la conservación de la biodiversidad con la resiliencia económica y climática.

“El reconocimiento internacional que recibe esta operación evidencia que Ecuador no solo conserva, sino que innova. La Amazonía es más que un ecosistema: es un activo estratégico para el planeta y, con este modelo, se demuestra que puede ser también un motor de desarrollo económico justo y regenerativo”, señaló el representante del Ministerio de Economía y Finanzas del Ecuador.

“El Programa Biocorredor Amazónico es una apuesta estratégica para transformar el paradigma de desarrollo en la región. Esta doble distinción internacional ratifica que  conservar puede ir de la mano con innovación financiera, colaboración entre sectores y redefinir el vínculo entre economía y biodiversidad”, destacó por su parte Galo Medina, director del programa Ecuador de The Nature Conservancy (TNC). 

La triple distinción sitúa a Ecuador como referente mundial en soluciones financieras basadas en la naturaleza y marca un precedente para otros países de la región y del mundo que buscan alinear sus estrategias de manejo de deuda fiscal con sus compromisos ambientales.