Mediante el Decreto Ejecutivo N° 859, del 5 de septiembre de 2023, el Estado ecuatoriano designó al Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica (MAATE) la responsabilidad de establecer el diseño y el funcionamiento del Biocorredor Amazónico. Asimismo, la entidad adquirió el compromiso de establecer un mecanismo financiero que genere recursos económicos en beneficio de la población y la conservación.
El Biocorredor Amazónico es mucho más que una franja de territorio. Es una respuesta integral frente a los desafíos en materia de ambiente, una solución resiliente ante las vulnerabilidades que hoy ponen en riesgo la estabilidad económica y social del Ecuador. A través de mecanismos innovadores —tanto financieros como de conservación—, el Biocorredor coloca a la Amazonía como protagonista de un programa que tiene el poder de transformar el futuro.
Foto: TNC Ecuador
Asegurar la conservación de la Amazonia ecuatoriana mediante la representación de los ecosistemas (terrestres y de agua dulce) y la implementación de medidas de adaptación y mitigación al Cambio Climático.
Apoyar a las comunidades locales de la Amazonia para la conservación de sus territorios, el mejoramiento de su bienestar y la incorporación de salvaguardas sociales y ambientales.
El Programa Biocorredor Amazónico es el resultado de un proceso que fue diseñado y continúa en constante trabajo colaborativo con la Confederación de Nacionalidades Indígenas de la Amazonía Ecuatoriana (CONFENIAE), organización que agrupa a más de 1.500 comunidades y representa a 11 nacionalidades indígenas de la Amazonía y 22 organizaciones afiliadas.
El objetivo es apoyar a que los pueblos y las nacionalidades indígenas, así como las comunidades locales, tengan un papel activo en los procesos de toma de decisiones sobre conservación que afectan sus territorios y su bienestar, y que las nuevas oportunidades de desarrollo sostenible estén en consonancia con sus valores culturales y medioambientales.